(1843)
Soren A. Kierkegaard (1813-1855) (42 años)
Sección de comentarios:
"El epígrafe del prologo"
"Lo que Targuino el sobernio
daba a entender con las amapolas de su jardín,
su hijo lo comprendió,
pero no el mensajero".
Muchos se hacen mensajeros de Kierkegaard.
Son muchos los que interpretan los libros de Kierkegaard, pero...no lo entienden. Por más que quieran parecerse al "soberbio", su terquedad, no alcanza al emisario, menos...al hijo.
Es necesario ser "hijo".
Kierkegaard, era un "Hijo" de Dios, es necesario ser "Hijo" de Dios, para comprenderlo a El.
Las "amapolas" de Kierkegaard.
Sus amapolas, florecieron en su existencia, y El, las arranca de esta, para ofrecerla en forma de libros, que solo entienden, los "Hijos" de Dios. Por más, que sus libros sean interpretados, sean analizados, sean reseñados, solo serán comprendidos por aquellos que se ubiquen en el mismo lugar, donde se ubicó Kierkegaard, "-EN CRISTO", donde se ES...Cristiano.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Esquema del libro.
Prólogo
Atmósfera
Elogio de Abraham
Problemática: Efusión preliminar
Problema I: ¿Hay una suspensión teleológica de lo moral?
Problema II: ¿Hay un deber absoluto hacia Dios?
Problema III: ¿Puede justificarse moralmente el silencio de Abraham frente a Sara, Eliezer e Isaac?.
Epílogo